Nuestro compromiso con la comunidad LGBTIQ+
En HIP, desde nuestra creación en 1983, hemos tenido la misión de fortalecer el liderazgo y la influencia de las personas latines buscando la creación de una cultura igualitaria a través de una visión inquebrantable y fuertemente comprometida con la justicia social y la prosperidad de todas las personas que habitan el continente americano. Por ello mismo es que hemos trabajado tenazmente en la construcción y consolidación de comunidades más justas y prósperas.
Dentro de ese compromiso reconocemos que las realidades que experimentan las personas latines no son homogéneas y que es importante resaltar la diversidad interna de nuestra comunidad en una variedad de ejes que incluyen el orígen étnico, la lengua, la religión, la condición socioeconómica y la nacionalidad, entre otros. Sobre todo, consideramos el respeto a la diversidad humana como uno de nuestros valores centrales.
Es por ello, que HIP incluye de manera más enfática dentro de sus compromisos, la defensa y promoción de la dignidad y los derechos de todas las personas de las diversidades sexuales y de género tanto en la América continental como en el Caribe.
Estas poblaciones han estado poco atendidas por el grueso de los proyectos filantrópicos. Aproximadamente sólo el 3% de los recursos movilizados por la filantropía se dedican a poblaciones LGBTIQ+. No habrá de sorprendernos, por tanto, que los proyectos enfocados en poblaciones LGBTIQ+ latines sean muy escasos.
Tenemos claro que los desafíos que enfrentan las poblaciones latines LGBTIQ+ son complejos y requieren la promoción y defensa de sus derechos humanos así como la apuesta por enfoques estructurados alrededor de la justicia tanto económica como restaurativa y participativa. Creemos que solamente de este modo lograremos hacerle frente a la exclusión y marginalización que día a día experimentan estas poblaciones.
Entendemos que no se puede promover ni la igualdad de género ni la igualdad racial si no se atienden las necesidades de las personas latines LGBTIQ+; de igual modo, tampoco puede ignorarse el hecho de que las personas en movimiento que son LGBTIQ+ están en situaciones especialmente vulnerables en nuestros países. De este modo, construir una cultura de justicia e impulsar liderazgos latines requiere indiscutiblemente la inclusión sin excepción de las voces de las mujeres lesbianas, los hombres gays, las personas bisexuales, trans e intersex y, desde luego, de todas aquellas identidades no occidentales que nombran también diferentes formas de encarnar las diversidades sexuales y de género en un continente y en una población tan cultural e históricamente compleja como lo es la comunidad latine.
Tristemente, estamos conscientes de que América Latina es en la actualidad la región en la que más crímenes de odio hacia personas LGBTIQ+ se cometen; esto no quiere decir que este tema no sea igualmente urgente en los Estados Unidos pues en dicho país la población latine es especialmente vulnerable a este tipo de violencias.Sin embargo, lo anterior explica no sólo la precariedad a la que se enfrentan cotidianamente las personas latines LGBTIQ+, sino también su subrepresentación en espacios de construcción de opinión pública y toma de decisiones. La exclusión es finalmente una de las consecuencias más evidentes de la concatenación de las violencias que viven las personas de las diversidades sexuales y de género a lo largo de sus vidas. Espacios como la familia, la escuela, los centros de trabajo, los espacios públicos así como los órganos de gobierno aparecen como sitios en los que urge impulsar una cultura del respeto, la igualdad y la no discriminación que pueda traducirse en la consolidación de comunidades incluyentes.
Es por esto mismo que desde HIP hacemos un llamado a todos nuestros colaboradores, sean estos financiadoras o aliados, para que asuman como propia la agenda a la que estamos aludiendo. Como ha sostenido nuestra Presidenta Ana Marie Argilagos, “[l]a filantropía debería ser una herramienta democrática para ayudarnos a construir poder, reunir recursos para nuestra comunidad, y ampliar nuestra esfera de influencia. HIP continuará rastreando el impacto de las diferentes fundaciones hacia nuestra comunidad : quiénes son, qué tipos de iniciativas son las que financian, cómo las financian–o quienes no. Seguiremos vigilando estas instituciones y apoyaremos a los líderes en filantropía que comprenden el impacto de asignar recursos hacia problemas específicos de las comunidades latines”.
Este es pues el posicionamiento y el compromiso de HIP. Invitamos a todas las personas que de una u otra forma colaboran con nosotros a sumarse a esta iniciativa.